Coword, la Asociación de Espacios Inmobiliarios Compartidos firma un acuerdo de colaboración con Banco Sabadell

Banco Sabadell apoya proyectos novedosos y disruptivos como el coliving o cohousing por lo que ha llegado a un acuerdo con la Asociación de espacios inmobiliarios compartidos Coword. La presidenta de la Asociación, Araceli Martín-Navarro lo explicaba así: “Coword ve en este acuerdo con el Banco Sabadell una propuesta de valor al Asociado aportándole soluciones financieras tanto en su vida profesional como en la personal, mediante la extensión de las condiciones a familiares de primer grado y un trato especial en aquellos productos que no se encuentren recogidos en el convenio”.

La Asociación se constituyó en 2021 con el claro compromiso social de dar voz a la nueva demanda de vivienda, por las nuevas formas de trabajar y convivir que se han visto aceleradas tras la pandemia, así como apoyar al sector inmobiliario español para que promueva y gestione los espacios inmobiliarios compartidos; como coliving o cohousing. Siempre con todas las garantías jurídicas y urbanísticas necesarias, defendiendo los intereses de todos sus asociados  y atendiendo a una demanda real de los que quieren vivir en espacios compartidos, como el potente interés de los inversores. Los asociados de coword son profesionales del sector Real Estate, arquitectos, diseñadores, constructoras, promotoras, operadores e inversores.Al respecto del convenio, la Vicepresidenta de la Asociación y Directora de Operaciones de Dovevivo en España, Irene Trujillo Félix explicaba que “el coliving ha demostrado ser mucho más resiliente que otras ramas de Real Estate a las fluctuaciones del mercado y tiene más margen de crecimiento y una demanda en auge. Por ello, muchos inversores han decido moverse a este sector”. El Coliving, al igual que otros espacios inmobiliarios compartidos, como Cohousing o Cosenior, es una figura entre el alquiler tradicional y el hospedaje, dirigido a grupos concretos que comparten intereses e inquietudes como los nómadas digitales, jóvenes que ya no son estudiantes y acaban de comenzar su vida profesional pero aún no han formado una familia; desplazados temporalmente por circunstancias laborales o los no tan jóvenes, que han alcanzado una edad en la que ya no tienen responsabilidades familiares y están en la última etapa de su carrera profesional e incluso los que ya se han jubilado. Se trata de un cliente que no se conforma con compartir un piso, sin más, busca un tipo de convivencia en el que la comunidad de intereses le aporte en su día a día, además de acceder a servicios de máxima calidad a un precio competitivo.